Con una actividad de difusión que consistió en la entrega de material de sensibilización a la comunidad, en el sector de la Plaza de Armas, la Oficina de Protección de Derechos OPD- San Felipe, conmemoró este jueves 12 de junio, el Día Mundial contra el Trabajo Infantil.
La fecha fue instituida el 2002 por la Organización Internacional del Trabajo como medio para atraer a la luz pública la situación que enfrentan niños, niñas y adolescentes que son explotados laboralmente.
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas INE, correspondientes al año 2003, en Chile el 5,4 por ciento de la población infanto – adolescente, es decir 196.104 menores de edad, desarrolla trabajos catalogados como inaceptables.
93 mil tienen entre 5 y 14 años de edad; y 102 mil entre15 y 17 años.
A nivel local son escasas las estadísticas que se manejan. En sus dos años de trabajo, la OPD ha recibido sólo cuatro casos de niños explotados laboralmente. Sin embargo, la cifra negra es alta y desde esa perspectiva, el llamado que realizó la directora de esta oficina, asistente social Pamela Herrera, es a denunciar en caso de tener antecedentes sobre niños que trabajan, más aún recordando que el trabajo entre todos aquellos menores de 12 años de edad es considerado inaceptable.
“La OPD es uno de los organismos junto a Carabineros y la Policía de Investigaciones, donde se acogen las denuncias en torno a peores formas de trabajo infantil. A lo largo de estos dos años hemos recibido cuatro casos donde se ha hecho la evaluación y la derivación pertinente para la intervención propiamente tal. Asumimos que son muchos más los casos. En el vertedero La Hormiga se registran situaciones complicadas donde son las familias las que fomentan el trabajo infantil”, señaló la profesional.
Se trata de una problemática que a la OPD – San Felipe preocupa, más aún considerando que en su número nueve la Declaración Internacional de Derechos del Niño establece que “debe ser protegido contra toda forma de explotación”.
En el año 2006, el Gobierno de Chile se comprometió a luchar por la erradicación del trabajo infantil para el bicentenario patrio.
El 2007 en tanto, fue promulgada la Ley 20.189 que adecúa las disposiciones del Código del Trabajo, de acuerdo a la reforma constitucional sobre la obligatoriedad de la educación media.
Las modificaciones señalan que los menores de 18 años y mayores de 15, podrán celebrar contratos de trabajo previa acreditación de haber culminado la educación media o encontrarse cursando ésta o la educación básica y sólo podrán realizar labores que no dificulten su asistencia regular a clases y su participación en programas educativos o de formación
Respecto de las peores formas de trabajo infantil, Pamela Herrera lamentó que las personas que lo fomentan o lo observan en su entorno, no se atreven a constatar su existencia, por vergüenza de reconocer la realización de estas actividades o por temor a involucrarse en problemas legales.
“Siempre hay un vecino, siempre alguien sabe que hay un niño que está siendo de alguna forma explotado laboralmente, pero la gente no se atreve a denunciar, pudiendo hacerlo de forma anónima. Lamentablemente falta compromiso y si no conocemos de estos casos, no podemos intervenir, noi podemos hacer las derivaciones pertinentes para terminar con esta problemática”, indicó.
Resaltó en este sentido, la creación de un sistema de registro de las peores formas de trabajo infantil, del Servicio Nacional de Menores. Una de las primeras actividades que se debió realizar fue la adaptación a nuestra realidad de los conceptos relacionados con las peores formas de trabajo infantil, compromiso adquirido al ratificar el Convenio Nº 182 de la OIT en el año 2000.